¿Por qué la Providencia?

¿Por qué "la Providencia"? Hay muchas cosas que los cristianos católicos creyentes no solemos tener en cuenta, como que, frente a la importancia que algunos dan al destino, a lo que va a ocurrir, a querer controlar nuestra vida o que suceda lo que queremos que ocurra o que no ocurra, la Providencia actúa de forma inesperada, creando situaciones o acontecimientos que ni siquiera nos imaginábamos. Yo procuro tener en mi vida presente a la Providencia para aceptar quién y qué soy: una persona mortal y limitada, pero en continúo proceso de cambio y en camino.

29/10/18

Cómo debe ser la Iglesia

Vaya por delante mi insistencia de que sólo escribo desde mi visión personal, mis vivencias y conocimientos.

"Cómo deber ser la Iglesia", insisten algunas personas, destacando conceptos como la humildad, la paciencia, la bondad, incluso la pobreza...

Tengo 44 años y he vivido diversas realidades de Iglesia, en mi relación con varias parroquias, con varios movimientos y entidades de diverso tipo, pero formando parte de la Iglesia Católica. Y sé que hay personas que hay con muchísimas más vivencias que yo, y precisamente estas personas no se cuestionan cómo debe ser la Iglesia, sino que trabajan directamente por el Reino de Dios, por Cristo, para así servir a los demás. Y es que esto es lo importante, así de claro.

Porque la Iglesia es mucho más compleja y diversa de lo que puedo explicar con este texto o de lo que he querido mostrar con el fotomontaje de cabecera, y no siempre vale con la "humildad", la "paciencia", la "bondad", o la "pobreza", pues normalmente, los que se expresan con esa contundencia son gente cargada de odio, ya sea por ideología o, sencillamente, por destruir, ya sea más o menos justificado por experiencias anteriores o por puro desconocimiento o fanatismo. Yo ya he aprendido a desconfiar y mucho de esas personas que así se manifiestan.

Yo soy y me siento Iglesia, formando parte de ese conjunto de seguidores de Cristo, de hijos de un mismo Dios, que intentan seguir ganando la Gracia del Espíritu Santo, y acompañados por la ternura de Nuestra Madre y el consejo y el ejemplo de tantos grandes santos que nos precedieron. A partir de ahí, dentro de la propia Iglesia, hay muchas personas, hombres y mujeres, que nos podemos equivocar (yo también). Yo creo en la Iglesia y quien la insulta es, sencillamente, porque no la conoce, está amargado por el motivo que sea o está lleno de odio.

¿"Cómo debe ser la Iglesia"? Eso es un misterio que depende sólo del designio de Dios, pero primero hay que creer en Él, y para eso hay que empezar por tener humildad, no por exigírsela a los demás.

Muchas gracias por leer esta reflexión personal, que sólo muestra mis vivencias y conocimientos. Que Dios nos bendiga e ilumine a todos.